“El personaje se mueve entre el borde de la locura y su rebelión personal:  en resumen, expresa una alegría que rápidamente puede convertirse en angustia e incomprensión”.

En medio de la tensión y el drama, la historia se desplaza entre escenas de stand up y fuertes situaciones de acción. De esta forma, “El Joker”  provoca risas contenidas que lo desestabilizan y lo sumergen en un mundo cruel y despiadado. Así el personaje se convierte en un potencial enemigo cuando no tiene más salidas que superar esos traumas. “La obra plantea el conflicto ético de la moral social, sumado a las controversias poderosas del personaje que nos manifiesta que todos tenemos algo de villano en nuestro inconsciente”, refiere Guillermo Ale, director de la obra. 

La Cuarta Pared es un grupo de teatro argentino, creado en 1992, que centra su hacer en el teatro político. Están constantemente, dentro y fuera del escenario, increpando la realidad de Latinoamérica, sus paradojas, injusticias y desigualdades, atacando sus arbitrariedades e involucrándose allá a donde van.